Sociedad

Los registros antropométricos permiten hacer comparaciones con respecto a estándares internacionales o anteriores estudios regionales. Foto: Dirección de Comunicaciones UdeA / Alejandra Uribe F.

Evaluar el estado nutricional de la población menor de 17 años de Antioquia es la tarea que tendrá, durante lo que resta del 2023, la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad de Antioquia. Este estudio, que se hará a partir de indicadores antropométricos, hace parte del seguimiento al «Plan docenal de seguridad alimentaria y nutricional 2020 – 2031», puesto en marcha por la Gobernación de Antioquia mediante la Ordenanza 5 del 7 de mayo de 2020.

«Es una alianza estratégica que nos permite potenciar los recursos para servirle a la sociedad», expresó Laura Inés González Zapata, directora de la Escuela de Nutrición y Dietética UdeA, unidad académica que ya inició el trabajo de campo en los municipios de la mano de la Secretaría de Inclusión Social y Familia.

La evaluación del estado nutricional por indicadores antropométricos de la población menor de 17 años de Antioquia permitirá, además de verificar los alcances de la política pública, saber qué pasó con la seguridad alimentaria de las niñas, niños y adolescentes del departamento durante y después de la pandemia por la covid-19.

Para ello, desde el pasado 17 de julio y hasta el 21 de octubre, los investigadores se desplazan por las subregiones de Antioquia para tomar registros de talla y peso, así como recoger información familiar de los participantes en el estudio. 

«El objetivo es lograr registros antropométricos —medidas del cuerpo— de 6120 menores de 17 años y entrevistar a sus padres o adultos responsables, para llegar a conclusiones con rigor científico que permitan trazar estrategias frente a la seguridad alimentaria en el departamento», dijo Lorena Mancilla López, investigadora principal y profesora de la Escuela de Nutrición y Dietética UdeA.

Las medidas antropométricas elegidas —talla y peso— serán comparadas con estándares internacionales prestablecidos y con estudios anteriores como el Perfil Alimentario y Nutricional de Antioquia 2019, también realizado por la Escuela de Nutrición y Dietética de la UdeA. «Así podremos saber si en esta población hay retrasos en el crecimiento, sobrepeso, obesidad o algún grado de desnutrición», explicó Argenis Giraldo García, coinvestigadora del proyecto.

En esta oportunidad, la definición del perfil nutricional de los menores de 17 años reviste una mayor importancia, porque la pandemia marcó cambios en todas las prácticas humanas. «Resulta fundamental que podamos tener esta información, que seguramente nos ayudará a comprender las afectaciones que sufrieron las familias en esta época tan difícil para todos», anotó González Zapata. 

En las entrevistas, los investigadores preguntarán a las personas responsables de la crianza sobre las condiciones socioeconómicas y demográficas del hogar; la adquisición de los alimentos; la actividad física de las niñas, niños y adolescentes y su exposición a la publicidad televisiva. «Con las respuestas sabremos sobre las posibles dificultades para garantizar la seguridad alimentaria que tienen las familias, los niveles de sedentarismo y qué tanto influye la publicidad en el consumo de productos ultraprocesados, que están directamente relacionados con el sobrepeso y la obesidad», argumentó Mancilla López.Con las medidas de talla y peso se puede establecer si hay retrasos en el crecimiento, sobrepeso, obesidad o desnutrición. Foto: Dirección de Comunicaciones UdeA / Alejandra Uribe F.

Recorrido y condiciones
 

De acuerdo con los planes de los investigadores, el trabajo de campo se extenderá hasta el próximo 21 de octubre y ya se inició en el Valle de Aburrá, Bajo Cauca y Urabá. El derrotero señala que se recolectarán datos en 32 municipios de las nueve subregiones para su posterior organización y análisis. 

Cada medida antropométrica que se sume al estudio tendrá que ser autorizada por los padres de familia o adultos responsables. «A los niños y niñas menores de cinco años los estamos buscando puerta a puerta y a los demás a través de las instituciones educativas, para evaluarlos siempre y cuando tengamos el permiso por escrito», dijo Mancilla López, quien pidió la colaboración de los antioqueños para llevar a buen puerto esta investigación. 

Los miembros del equipo investigativo están debidamente identificados con carnet, camiseta, chaleco y gorra que acreditan su trabajo para la Gobernación y la Universidad de Antioquia. «De la buena recepción por parte de los adultos depende en gran parte nuestro trabajo, porque además de otorgar los permisos, ellos serán los responsables de responder nuestras preguntas», añadió la profesora Mancilla. 

A partir del 21 de octubre, el equipo académico de la Escuela de Nutrición y Dietética de la UdeA construirá el perfil que dará luces para seguir trabajando por la seguridad alimentaria en Antioquia. «Será una herramienta para que las autoridades locales, regionales y la comunidad mejoren sus prácticas nutricionales y tomen decisiones más conscientes», concluyó la directora González Zapata.