Z7_89C21A40L06460A6P4572G3304

Teclas de Ayuda de acceso Rápido

ALT + 1 Inicio

ALT + 2 Noticias

ALT + 3 Mapa de sitio

ALT + 4 Búsqueda

ALT + 5 Preguntas frecuentes

ALT + 6 Atención al ciudadano

ALT + 7 Quejas y reclamos

ALT + 8 Iniciar Sesión

ALT + 9 Directorio telefónico

Letra:

Contraste:

Clic aquí para ir a la página gov.co
jueves, 28 de marzo 2024
28/03/2024
Síguenos
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3305

Sociedad

Z7_89C21A40L06460A6P4572G3307
UdeA Noticias
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3386
Sociedad

Inseguridad alimentaria se agravó en 11 ciudades, dice estudio de universidades

02/09/2022
Por: Carlos Olimpo Restrepo S. - Periodista

El 71.6 % de hogares en Colombia presenta inseguridad alimentaria. En las zonas rurales, la cifra sube al 73.4 % y en estratos 1 y 2 supera el 82 %. La seguridad hídrica también tiene saldos en rojo. Así lo revela un estudio de la Alianza Universitaria por el Derecho Humano a la Alimentación Adecuada —Aludhaa—. Los investigadores entregaron una serie de recomendaciones para que los gobiernos enfrenten esta preocupante problemática.

persona consumiendo alimentosLa inseguridad alimentaria en el país está por encima del 73 %, según un estudio de 11 universidades en igual número de ciudades capitales. Foto Dirección de Comunicaciones UdeA  / Alejandra Uribe F.

El confinamiento por la pandemia de la covid-19 agudizó la inseguridad alimentaria en Colombia, según lo muestra un reciente estudio de una alianza de universidades públicas y privadas, en el cual también se advierte sobre un aumento de la inseguridad hídrica en el país. 

La Alianza Universitaria por el Derecho Humano a la Alimentación Adecuada —Aludhaa—, integrada por profesionales de las universidades colombianas que ofrecen programas académicos de Nutrición —entre ellas la Universidad de Antioquia—, fue la encargada de llevar a cabo la investigación, que se desarrolló entre finales de 2021 y comienzos de 2022. 

La investigación se adelantó en 11 capitales de departamento: Armenia, Barranquilla, Bogotá, Cúcuta, Leticia, Medellín, Pasto, Popayán, San Andrés, Tunja y Yopal. Los investigadores realizaron en estas ciudades 1522 encuestas y se encontró que el 71.6 % de los hogares de esas ciudades presentaban inseguridad alimentaria, es decir, no tenían acceso suficiente a alimentos nutritivos para garantizar un desarrollo normal y llevar una vida activa y saludable.  

El estudio mostró que los más afectados son los hogares rurales, con un 73.4 % de inseguridad alimentaria, y los hogares pobres —estrato 1, con 86.4 %, y 2, con 82.9 %—, o con mujeres cabeza de familia, con un 77.8 % en inseguridad alimentaria. 

«Eso muestra que el confinamiento agravó la situación. La encuesta está, de alguna forma, recogiendo los efectos de la pandemia. Era un asunto que venía antes de esto, la pandemia lo que hizo fue recrudecerlo», aseguró Lorena Mancilla López, profesora de la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad de Antioquia e investigadora participante de este estudio, junto con la también docente Martha Alicia Cadavid. 

Mancilla López, doctora en Salud Pública, destacó que para llegar a estos datos se tomó como referencia la tercera Encuesta Nacional de Situación Nutricional —Ensin—, elaborada por varias instituciones del Gobierno nacional y que contó con el apoyo de entidades internacionales. La Ensin se realizó entre 2015 y 2016 en 295 municipios, donde se hicieron entrevistas a más de 151 000 personas. En este caso se encontró que el 54.2  % de los hogares de Colombia estaban en inseguridad alimentaria, una reducción con respecto al 2010, cuando el 57.7 % presentaba una condición similar. 

La reciente encuesta de Aludhaa señaló, además, que el 34.8 % de hogares experimentaron escasez de recursos económicos para la compra de alimento durante primeras semanas de confinamiento, mientras que el 64.3 % de los hogares hicieron estrategia de afrontamiento ante esta situación, es decir, buscaron alternativas para no verse muy afectados por el toque de queda. 



Son 14 instituciones públicas y privadas, de distintas regiones de Colombia, las que pertenecen a la Alianza Universitaria por el Derecho Humano a la Alimentación Adecuada —Aludhaa—. Se trata de la Universidad Nacional de Colombia, Universidad de Antioquia, Universidad del Atlántico, Corporación Universitaria Remington, Universidad Metropolitana, Pontificia Universidad Javeriana, Universidad de Pamplona, Universidad del Sinú, Universidad Libre Seccional Pereira, Universidad Mariana de Pasto, Universidad Católica de Oriente, Escuela de Deporte de Cali, Universidad Industria de Santander y el CES. 

Entre las estrategias, los encuestados señalaron que recurrieron a la adquisición de alimentos más baratos o de menor calidad, fiar comida o solicitar créditos para comprarla, disminuir las porciones o el número de comidas y buscar que uno o varios miembros de la familia comieran por fuera del hogar.
 

Dificultades con el agua 

La encuesta de Aludhaa también buscó establecer cómo está la seguridad hídrica, es decir, el acceso al consumo de agua para garantizar la salud humana, el sostenimiento de los medios de vida y la producción. Se encontró que 16 de cada 100 hogares estudiados está en inseguridad, es decir, la asequibilidad, la confiabilidad y la adecuación o seguridad de abastecimiento de agua están reducidas de manera crítica o son inalcanzables para esas familias. 
 
Además, el 30.9 % de los encuestados para el estudio manifestó no tener suficiente agua para cubrir todas sus necesidades, el 24 % indicó verse obligado a cambiar de horarios o planes debido a problemas con el líquido, mientras el 14.5 % no pudo lavarse las manos con frecuencia o después de actividades antihigiénicas o insalubres por insuficiencia de agua, pese a las recomendaciones de las autoridades de salud ante la pandemia de covid-19. 
 

Recomendaciones para enfrentar esta problemática

precios en vitrina de carnicería
Una de las estrategias de los hogares durante la pandemia fue consumir alimentos más baratos o de menor calidad. Foto: Dirección de Comunicaciones UdeA / Alejandra Uribe F.


Los participantes del estudio fueron más allá de recoger los datos y hacer un diagnóstico. También incluyeron una serie de recomendaciones, algunas más urgentes, para que los gobiernos nacional, regionales y locales implementen, con el fin de revertir esta situación en el mediano plazo. 

La docente Lorena Mancilla López destacó cinco aspectos que son fundamentales para lograrlo: restablecer la soberanía alimentaria, fortalecer la producción de alimentos propios, incentivar la agricultura campesina, incentivar los circuitos cortos de comercialización y crear políticas públicas que fortalezcan la agricultura y la economía campesinas. 

«Hay que hacer también mucha pedagogía y educación nutricional, porque además del problema del hambre se presentan también problemas por el consumo frecuente de productos ultraprocesados y de bebidas azucaradas», anotó la investigadora, quien agregó que esto debe ir acompañado de políticas que faciliten la disponibilidad de alimentos diferentes en el hogar, de tal manera que no sea más caro comprar frutas y verduras que gaseosas y productos de paquete.  

En este sentido insistió en la necesidad de que los productos agrícolas lleguen de manera más directa a los consumidores, mediante la implementación de sistemas como los mercados campesinos. «También hay que seguir promoviendo la creación de huertas comunitarias urbanas, así como la protección de las semillas nativas y criollas, esa es la mejor manera de sostener y proteger la biodiversidad», agregó. 

La nutricionista de la UdeA llamó la atención sobre la necesidad de que los programas gubernamentales de alimentación y nutrición no se limiten a los menores de cinco años y a mujeres gestantes. «Hay población en alto riesgo, como los adultos mayores y las mujeres en general, no solo las que están en embarazo. Por esto se deben extender esas políticas a otros grupos vulnerables», dijo.  

Mancilla López también recordó la importancia de incentivar la productividad en el campo, pues en Colombia hoy se importa el 30 % de la canasta básica familiar y varios de esos productos se cultivaban hasta hace unos años en el país. 

Para la profesora, el hecho de implementar la ley de comida chatarra es necesario, pero pidió ir más allá, sobre todo en espacios educativos, porque «los niños están confinados por más de siete horas en sus colegios y en la mayoría de ellas solo les ofrecen gaseosas y productos empaquetados. Si al menos se aplicara esto, es mucho el impacto que se lograría», aseguró.

Z7_89C21A40L06460A6P4572G3385
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3387
Correo del contacto
Correo del contacto
[57 + 604] 219 5026
Z7_89C21A40L06460A6P4572G33O4
Z7_89C21A40L06460A6P4572G33O6
Lo más popular
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3340
 
Universidad de Antioquia | Vigilada Mineducación | Acreditación institucional hasta el 2033 | NIT 890980040-8
Recepción de correspondencia: calle 70 No. 52 - 21 | Apartado Aéreo 1226 | Dirección: calle 67 No. 53 - 108 | Horario de atención
Conmutador: [57 + 604] 219 8332 | Línea gratuita de atención al ciudadano: 018000 416384 | Fax: [57 + 604] 263 8282
Peticiones, quejas, reclamos, sugerencias, denuncias, consultas y felicitaciones
Política de tratamiento de datos personales
Medellín - Colombia | Todos los Derechos Reservados © 2020