Ciencia

Elkin y Juan David en el parque del pueblo alimentando a un perro callejero. Foto tomada de https://www.facebook.com/Foodog-188497138211899

Elkin Santiago Duque, 16 años, y Juan David Duque Naranjo, 17 años, son estudiantes de la Institución Educativa Presbítero Luis Rodolfo Gómez Ramírez, en El Santuario, y estaban preocupados por la proliferación de perros callejeros y las verduras que se desechan en la plaza de mercado y legumbrerías, por eso se idearon en clase de tecnología un proyecto que tuviera algún impacto en su municipio, así nació Foodog.

Lo presentaron en la feria del colegio, pasaron a la feria regional y luego vinieron a Medellín a la feria de la ciencia donde lograron un cupo para ir a un evento en Ecuador. Son los únicos de su colegio que han ganado una feria de la ciencia nacional.

Junto a su profesora Morelia Gómez trabajaron para crear complemento alimenticio para caninos con residuos de zanahoria, habichuela, papa y arroz. Además tiene harina de trigo, de soya y lactosuero.

“Es importante que miren el entorno y sean conscientes de las problemáticas que existen. No solo son los libros y lo que encuentren en Internet, sino que cada persona puede ser artífice de su conocimiento. La invitación era a que desde su creatividad y su innovación pudieran proponer soluciones”, cuenta la profesora.

La investigación fue mixta, de tipo experimental y como resultado ya tienen un producto de buena calidad y de bajo costo que fue sometido a pruebas de palatabilidad para saber si a los perros les gustaría y a análisis bromatológico (que incluye análisis microbiológico, toxicológico y clínico).

Ciencia más allá de la academia

De izquierda a derecha la profesora Morelia Gómez, Elkin Santiago Duque y Juan David Duque Naranjo. Foto: Daniela Margarita Ramírez Ozuna.

Después de ganar la feria de la ciencia en Medellín tuvieron dos meses para mejorar su idea y ahí fue donde llegó Julián Quiroz a acompañarlos como voluntario. Él es egresado de Ingeniería de Alimentos de la Universidad de Antioquia, está vinculado como investigador del grupo Ofidismo y Escorpionismo y es estudiante del doctorado en Ciencias Farmacéuticas.

Julián creyó que sería una oportunidad para devolver lo que ha aprendido, recordar su paso por las ferias de la ciencia en el colegio o como explorador en el Parque Explora. “Los pelaos llegaron allá —al Parque Explora, organizador de las ferias de la ciencia en la ciudad junto a la Alcaldía de Medellín y EPM— y necesitaban un asesor. Miguel y Vanesa, dos de los encargados, pensaron en mí, me preguntaron si podía y yo dije que sí porque para mí es una forma de retribuir al Estado, a la sociedad y a la ciencia que me hayan puesto en el lugar en el que estoy ahora”, cuenta Julián.

Ya había un prototipo del producto, pero el alimento tenía problemas como baja proteína, la croqueta era muy dura y no la habían ensayado desde la parte microbiológica. “Querían estandarizarlo y eso fue lo que hicimos: creamos una metodología, estandarizamos el proceso, mejoramos el contenido nutricional del alimento y trabajamos en cómo obtener una croqueta sensorialmente agradable para los caninos”, explica Julián.

Elkin Santiago recuerda el trabajo en equipo y se refiere a Julián como “un apoyo incondicional, surgieron muchas ideas y nos ayudó, por ejemplo, a hacer la tabla nutricional del producto”.

Además de enseñar, este egresado pensó que sería una oportunidad para “empujarlos un poco a que sigan investigando”. Es como sembrar, dice Julián, o ayudarles a creerse el cuento de que pueden llegar tan lejos como quieran.

Fue un equipo joven con mucha creatividad. Elkin y Juan David están a meses de terminar el colegio y Julián con 27 años ya ha recorrido un camino en la investigación que empezó en el pregrado. Para este profesor universitario acompañar a los estudiantes del colegio que empiezan este proceso le enseñó que debe reinventar a diario las formas de transmitir el conocimiento. Además le reafirmó algo en lo que ha creído: que cualquiera puede hacer investigación, que no se necesita ser la persona más inteligente o tener muchos títulos pero sí muy disciplinada.

Para Elkin Santiago se trata más bien de superar obstáculos: “hacer ciencia para mí es algo muy grande, es salir de los límites del salón donde solo se entrega una tarea, es saber que desde el colegio puede surgir una idea que ayude a resolver una problemática”.