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Becarios Fulbright en la ceremonia de entrega de Becas. Fotografía Diego Zamora

Contando a estos nuevos beneficiarios, 114 miembros de la comunidad universitaria han recibido, en el periodo 1958-2018, este apoyo económico de Fulbright. Igualmente, durante los 60 años, 33 estadounidenses han realizado en la Alma Máter labores de investigación y docencia (I&D).

Cifras significativas teniendo en cuenta, como expone Santiago López Álvarez, asesor en cooperación científica de la Dirección de Relaciones Internacionales, que postularse a estos programas de becas internacionales no siempre es un proceso inclusivo: el dominio del inglés y los altos costos de los exámenes estandarizados (GRE y TOEFL) exigidos para la postulación, son un filtro difícil de atravesar para personas con escasos recursos económicos.

“Muchos colombianos que hablan inglés fueron favorecidos por situaciones socioeconómicas que les permitieron desarrollar una suficiencia en una segunda lengua; esto genera que la mayoría de candidatos a Fulbright vengan de universidades privadas. En cuanto a los exámenes estandarizados, en promedio cuestan un millón de pesos, una inversión irrisoria comparada con los montos que otorga la beca, pero que no te garantiza que resultarás beneficiado”, advierte López.

Las dificultades anteriores no son responsabilidades que Fulbright deba sortear, como señala el asesor, sino el postulante junto a su universidad y el Estado colombiano, preparándose en la comprensión de entornos multiculturales y globales, y construyendo competencias para que la postulación refleje el conocimiento/talento verdadero del candidato.

Formar un líder indígena

Entre los becarios Fulbright vinculados a la Universidad de Antioquia se destaca Juan Pablo Taramuel, estudiante de la Maestría en Agronegocios de la Facultad de Ciencias Agrarias y la Facultad de Economía, quien obtuvo la Beca Fulbright Líderes Indígenas para realizar una Maestría en Economía Agroindustrial en Southern Illinois University.

Taramuel pertenece a la Reserva Indígena de Cumbal (etnia Pastos), ubicada en el suroeste de Colombia, y durante su carrera profesional ha participado en programas norteamericanos para la formación, como Martin Luther King Jr. Fellowship Program; Study of the U.S. Institutes for Student Leaders y Ohio International Agricultural & Horticultural Intern Program, por el cual vivió un año en una granja lechera en el estado de Colorado.

El estudiante ha acumulado experiencia, además, en gestión de proyectos agrarios y práctica clínica veterinaria en comunidades indígenas, siendo líder de actividades alrededor de la calidad de la leche y las buenas prácticas de ordeño, el manejo del ganado y la nutrición animal. Por esto, pretende que su maestría se concentre en “aprender a formular políticas agropecuarias, planes y programas de desarrollo rural, y a coordinar proyectos sociales y productivos, para contribuir al desarrollo socioeconómico de los indígenas en el marco de la agricultura sostenible y la preservación de valores culturales”.

Fulbright en Colombia

De acuerdo con el informe anual de Fulbright Foreign Scholarship Board, la máxima autoridad del Programa Fulbright a nivel global, durante los últimos ocho años, los aportes del Gobierno Nacional a la Comisión Fulbright Colombia pasaron de 2,2 millones de dólares a 9.3 millones de dólares, lo que significa un aumento del 323% y ubica al país en la primera posición, entre todas las comisiones Fulbright del mundo, en recursos aportados a este programa de becas, incluso por encima de Alemania, Corea y Brasil, históricamente más activos. 

Este crecimiento permitió que la última cohorte de becarios fuera la de mayor volumen en la historia de Fulbright Colombia, y además que este 2018 sea el de mayor presupuesto, con más de 20 millones de dólares si se cuenta el dinero otorgado, a su vez, por las universidades estadounidenses. En términos de becas, en estos ocho años se pasó de 116 a 247, de las cuales más de la mitad han sido para estadounidenses que llegan al país a realizar actividades I&D.

Becarios cohorte 2018

Los becarios egresados son Grace Carreño Flórez, doctorado en ciencias clínicas y traslación, University of Arizona; Luisa Rojas Valencia, doctorado en microbiología e inmunología, University of Pittsburgh; Oscar Piedrahita, doctorado en filosofía, University of California Irvine; y Amalia Rodríguez Valencia, quien realizará una estancia de investigación en economía experimental y del comportamiento, en The University of Maryland.

Los docentes que fueron becados son Carolina Cuesta Hincapié, doctorado en diseño de aprendizaje, Purdue University; Santiago Giraldo Cárdenas, doctorado en ciencias del océano y la atmosfera, University of California, Los Angeles; y Diego Manco Berrío, doctorado en matemáticas, Oregon State University.

A su vez, fue becado el investigador Daniel Muñoz Escudero, miembro del Grupo Inmunovirología, para hacer un doctorado en biología molecular y computacional, University of Colorado Boulder; y el administrativo Santiago López Álvarez, quien realizará un doctorado en ciencias políticas, Rice University.